David Rojo
Un planeta visible, luego otro y otro; cinco en una grata jornada vespertina-nocturna mirando hacia el cielo desde Cabo San Lucas.
No sólo los cincos planetas, a la magnífica jornada se sumarían la Luna llena y entre tantos otros elementos como la Nebulosa del Hombre Corriendo y la Nebulosa de Orión, las dos estrellas más brillantes del firmamento: Sirio y Canopus.
Al paisaje estelar, el mar. Aquí, al final de la tierra peninsular con el Golfo de California y el océano Pacífico.
Vaya pinceladas de la naturaleza.
Estamos en Baja California Sur. Aquí, en Los Cabos.
Con el azulado de la tarde misma espectacular se veía a la Luna llena.
Ya para las 18:00 horas Venus saludaba a la bahía de Cabo San Lucas con la constelación Sagitario al lado izquierdo; escasos minutos después, hacia el Oeste, hacía lo propio Mercurio sobre la banda naranja que iba quedando al ocultarse el sol.
A las 18:22 horas, Saturno. En ese momento el planeta de los anillos en diagonal con Venus.
Tiempo después Júpiter posando para la foto con la Mariposa de Orión.
Y ya a la medianoche, a plenitud, Marte en ĺinea imaginaria con Sirio, en medio la constelación Can Menor, con Procyon, la octava estrella más brillante en el cielo nocturno.
Hace algunas horas que Venus y Marte han dejado de verse. Pero, qué tal inconfundibles las dos estrellas más brillantes, también en línea imaginaria diagonal que cruza Can Mayor y a Popa: Sirio y Canopus.
También, en diagonal con Júpiter, la estrella Aldebarán en el ojo mismo de Tauro.
Qué decir de las estrellas Pólux y Castor de la constelación Géminis.
Y a la izquierda, hacia el Norte la siempre visible estrella Polaris, de la constelación Osa Menor.
Del atardecer al anochecer Los Cabos gran ventana al universo.
Y todavía el Triángulo de Verano con las gigantonas estrellas Deneb (constelación Cisne), Vega (Lira) y Altair (Águila).
Tanto para observar.
Para registrar.
Aquí, la gran pincelada de la naturaleza en esta región sudcaliforniana con sus espectaculares mares, el magnífico cielo y para decir aquí estoy la no menos espectacular Sierra de La Laguna con sus venados, linces, águilas, zorras…el último lugar de los pinos.