David Rojo
Se le ve y se le escucha bien de cara a las cámaras de grabación y micrófonos.
Se trata de Cynthia López Castro. Es directa en cuatro palabras:
– “AMLO engañó al pueblo”.
Se le pregunta:
–¿AMLO ha sido corrupto?
Responde:
“Él y su familia”.
Otra línea de tres palabras sobre AMLO:
“Corruptor de instituciones”.
Y remata:
“Los vamos a juzgar”.
La entrevista en Latinus. La entrevistada en ese momento era activa y destacada priista.
Ya no está en el PRI.
Hizo campaña en la Ciudad de México contra Morena; fue electa Senadora priista.
Tuvo los votos de electores que fueron por una opción diferente a la propuesta política morenista; hoy esos electores se quedaron sin sus votos. Y Morena se quedó con la Senadora.
Cynthia López Castro dice que ahora está en Morena “por estar del lado correcto de la historia”.
Vaya incongruencia y desfachatez política de ambas partes.
Si cuando priista recibió votos López Castro por ser una opción diferente a Morena, ¿por qué diablos, entonces, desde esa campaña no hizo proselitismo por lo que llama ahora estar en el lado correcto de la historia?
Se impone el cinismo político: No importa la democracia ni los electores. Lo que queda es el oportunismo, la desmemoria y la deslealtad.
Aparte, Morena ¿así se construye democracia?
Que se les resbale todo, pues va con lo del cinismo político. Pero, los electores van a las urnas por la democracia. Las urnas no se deben de apestar por deslealtad.
Desgraciadamente así es la política tiene dos caras, buscando oportunismo en interés personal sin importar a largo plazo daño económico y social de país tercermundista que ven la política como un medio de enrrequcimiento a costa de los que trabajamos y producimos.