Dragón, llega Los Cabos Extraordinario al registro fotográfico de 50 constelaciones

David Rojo

Dragón, como su nombre, todo grande. Imponente. Saluda a Los Cabos desde el Norte. Entre su enorme cola la constelación Osa Menor.

Toda una magnífica postal astronómica para esta región sudcaliforniana en medio de dos mares, con la que Los Cabos Extraordinario –sitio de comunicación que dirige el periodista David Rojo Pacheco– llega al registro fotográfico de 50 constelaciones.

Hubo varios intentos del registro fotográfico; primero desde Vista Real, luego desde la azotea de un hotel del corredor turístico. Pero, la estrella Giausar (la última de la cola) al momento de la obturación quedaba atrás de la serranía. Y ni modo.

Aparte de Dragón y Osa Menor la vecindad estelar era espectacular. Sin embargo una y otra vez por una estrella no se podía compartir tan grata experiencia del cielo nocturno.

Pero, que tal Cabo del Este.

Buen motivo y buen objetivo para acampar en la playa La Fortuna. Y vaya oportunidad para disfrutar del cielo nocturno. México tiene mucho que sentir orgullo por lo extraordinario de Los Cabos y su incomparable cielo nocturno.

Y zaz.

A la obturación fotográfica en exposición prologada hasta las tiendas de acampar salen con Dragón.

En Wikipedia se destaca que “Draco (el dragón) es una constelación del norte lejano, que es circumpolar para muchos observadores del hemisferio norte. Es una de las 88 constelaciones modernas, y una de las 48 constelaciones listadas por Ptolomeo. El polo norte de la eclíptica está en Draco”.

Además, se indica que “aunque muy grande, Draco no tiene estrellas especialmente brillantes. La cabeza del dragón está representada por un cuadrilátero de estrellas situadas entre Hércules y la Osa Menor”.

En cuanto a mitología, en Wikipedia se refiere:

“El catasterismo de la Serpiente, en la mitología griega, tiene variantes. Eratóstenes nos dice que esta es la gran serpiente que se halla recostada entre las dos Osas. Se dice que es la que vigilaba las manzanas de oro —el dragón de las Hespérides—, a la que Heracles mató.

“A esta se le dio también un puesto entre las estrellas por mediación de Hera, quien la había destinado a ser guardián del jardín y de las manzanas de oro, para defenderlas de las Hespérides.

“Es que Ferécides cuenta que Hera había sido desposada por Zeus, y que, cuando los dioses le traían sus regalos, la Tierra llegó trayéndole las manzanas de oro junto con las ramas. Al verlas se llenó de asombro Hera y dijo que se plantasen en el jardín de los dioses, que se hallaba donde estaba Atlante 45 o en el monte Atlas.46 Como las hijas de este andaban siempre cogiéndolas a hurtadillas, destinó como guardián a la serpiente, que era de un tamaño descomunal. Tiene un distintivo grandísimo: sobre ella se halla la imagen de Heracles que Zeus colocó como recordatorio del combate y es muy fácil de reconocer por la forma en que están trazadas las figuras.45

“Hay también quien dice que este dragón fue arrojado contra Minerva por los gigantes, cuando estaba luchando contra ellos. Minerva, sin embargo, atrapó su forma retorcida y lo lanzó a las estrellas, y lo fijó en el mismo polo del cielo. Y así hasta el día de hoy aparece con el cuerpo retorcido, como si recientemente fuera transportado a las estrellas.46 Según otra versión, se trataba de la forma de serpiente que tomó Zeus para escapar de su padre, Crono”.

Con el saludo de Dragón a Los Cabos, gran ventana al univers.