David Rojo
Al fondo un crucero turístico. Un referente permanente en la bahía de Cabo San Lucas. El destino turístico se llenó de visitantes, de avecindados. Hoy son menos los sudcalifornianos.
A primer cuadro destaca un nido. Que no sea de los últimos nidos en Cabo San Lucas.
Tiene, Cabo San Lucas, una interesante población de aves de diferentes tamaños y colores.
El arcoiris tiene alas.
El Paraíso también tiene alas.
Tiempo atrás un Águila Real juvenil fue asistida en la desembocadura del arroyo Salto Seco.
Aves, vida de milenios en Los Cabos.
Aves, vida de milenios al final de la tierra, en Cabo San Lucas.
Que no se esté ante los últimos nidos de cara al mar.
La foto del crucero turístico con el nido es testimonial de embarcaciones diferentes con el paso de los siglos en la bahía de Cabo San Lucas, pero con hogares de siempre de vidas emplumadas.
La Nao de la China o piratas con Cavandish en el siglo XVI, las aves citadas en las crónicas de los misioneros jesuitas en el siglo XVIII.
Los nidos han seguido, las embarcaciones han cambiado.
El modelo económico es otro.
Que el nido en la foto de este sitio de comunicación de Los Cabos Extraordinario no sea de los últimos de cara a la bahía de Cabo San Lucas, de cara al mar.
Tiempo que el crecimiento no quite. Que se brinden oportunidades mejores.
Hay vida milenaria aquí. Que siga siendo milenaria.